12 de mayo de 2010

Derribo del "BAR ROMERO"


Esta mañana, casi a la hora que algunos de nuestros escolares salían de viaje fin de curso, comenzaba la demolición del Hostal Restaurante Amistad.




Quizás por este nombre no sea tan conocido como por: Hostal Hnos. Rosa, pero sobre todo por: “Bar Romero”.

Durante estos años ha cambiado varias veces de manos, aunque sin cerrar las puertas a su clientela. Pero los edificios con el paso de los años envejecen y sus instalaciones, antiguas y obsoletas, no cumplen las normativas que se exigen en la actualidad, para estos locales públicos. La nueva normativa de los limitadores en las instalaciones eléctricas, parece la culpable del abandono de la actividad.

El “Bar Romero” ha sido lugar de encuentro de muchas generaciones de nuestro pueblo.
Ahora, con este derribo de hoy, se pone fin al penúltimo elemento que podíamos identificar, de una hipotética postal veraniega de los años 60 y 70. Los inmensos eucaliptos, que formaban ese gigantesco túnel verde. Los troncos, decorados con los nombres de tantos mojinos y mojinas, entre corazones y flechas. Las huertas, frescas por las noches después del riego. La explanada delantera del Silo, gigantesca terraza para el “Bar Romero”, y donde los niños jugábamos junto a la bascula. Sólo identifico ahora “el Silo”, aunque con la cara lavada y el interior irreconocible. (El Silo se merece un comentario aparte, otro día).
.


Desconozco si tras la demolición se construirá o se dejará como solar. Lo que si está claro es que el pueblo, sus edificios, sus personas, sus visitantes… cambian. O mejor dicho, cambiamos, quizás el paso de los años respeta mejor a los edificios, que a las personas, pero al final todos sabemos que tenemos fecha de caducidad.



Y después del derrumbe comienza…
Antigua casa de "Cartones".

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si que me trae muchos recuerdos. Sobre todo de lechón, calamares, bacalao... y cervecitas.